Despues de la primera experiencia, busqué por casa otra botella que pudiera ser victima propicia para convertirse en lámpara. Encontré una botella de un licor del Jerte, que estaba medio llena (no tiré el contenido…) y me puse manos a la obra. Ya sabía a quien se la iba a preparar, asi que despues de sufrir con el agujerito mas de lo recomendable y otra visita al chino a por algo para rellenar el resultado fue:

Botella de Licores Valle del Jerte de estructura rectanguar, relleno en plata y pantalla piramidal en negro. Mi prima, quedó encantada con ella, y me consta que siempre la tiene expuesta en sitios principales de su casa. Es un encanto!
